Situación crítica
- COAG Almería ha trasladado al delegado de Agricultura en la provincia de Almería y a los responsables en materia de Agua de la Delegación, su preocupación por la incertidumbre existente en torno al abastecimiento de agua para riego al inicio de la campaña en diversas áreas de nuestra provincia, siendo la Comarca de Níjar la de mayor preocupación.
- La organización agraria solicita a la Delegación alternativas efectivas para aliviar la presión de la desaladora de Carboneras a través de la agilización de los proyectos que están ya puestos en marcha. Asimismo, se ha abordado la situación del Poniente almeriense donde la solución más acertada apunta hacia el empleo de aguas no convencionales en estas áreas.

Almería, 7 de julio de 2025.- La Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas, COAG, de Almería, se reunió el pasado jueves, 3 de julio, con el delegado Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural en Almería, Antonio Bartolomé Mena Rubio, para trasladar la preocupación existente en el sector agrario por el abastecimiento de agua de riego al inicio de la campaña.
Al encuentro han asistido, además, los principales responsables de Agua de la Delegación provincial, Carlos López Cañavete, Responsable de la Coordinación Provincial de Aguas, y Guillermo González Bedmar, responsable del Dominio Público Hidráulico y Calidad de Agua. Mientras que por parte de COAG Almería estuvieron presentes Andrés Góngora, secretario Provincial de COAG Almería; Antonio Moreno, secretario de Organización de COAG Almería; y miembros de la Ejecutiva Provincial.
Durante el encuentro se ha realizado un recorrido por la situación actual de abastecimiento de agua en toda la provincia, abordando además las previsiones para la siguiente campaña, próxima a comenzar, convirtiéndose en temática central de la misma la delicada situación que se está viviendo en la comarca de Níjar. Así, desde COAG Almería se ha insistido en la necesidad de acelerar la búsqueda de alternativas para dar respuesta a los recursos urbanos del Levante almeriense. En este sentido, según ha explicado el secretario Provincial de COAG Almería, Andrés Góngora, al término del encuentro: “Nos han trasladado que hay proyectos, incluso algunos ya puestos en marcha como la posibilidad de usar el agua del trasvase Tajo-Segura, potabilizándola previamente, así como el recurso de una planta desaladora privada que hay en el levante almeriense. Si no se agilizan las obras necesarias para que ambas medidas sean materializadas, la situación va a ser crítica. Si se consiguen, la situación en Níjar puede verse aliviada. Pero no se puede obtener una garantía en firme, así que la preocupación sigue ahí”.
Desaladora de Carboneras y Planta Mar de Alborán
En los últimos años los cortes de agua, procedentes de la desaladora de Carboneras, en esta comarca, han sido recurrentes pues se produce una tensión en el consumo derivado del aprovechamiento para los usos urbanos y de la industria turística. En este sentido, COAG Almería coordinó una reunión hace unas semanas con los principales responsables de Acuamed, empresa gestora de dicha desaladora, en la que se puso en conocimiento de la organización agraria que la infraestructura se encuentra funcionando al 92% de su capacidad, con 11 de los 12 bastidores disponibles en pleno rendimiento, por lo que se halla al límite de sus posibilidades de abastecimiento. Dado este inquietante contexto, y de cara a aliviar la presión existente sobre la desaladora, junto a las dos medidas ya anunciadas, los responsables de Agricultura han informado de una tercera solución, a través del aprovechamiento de la planta Mar de Alborán -antigua Rambla Morales-, “una planta desaladora, privada, que, desde luego, no es el modelo de COAG, pero que también puede aliviar la situación de cara a esta nueva campaña aunque también nos han confirmado que está produciendo muy poca agua y que su empleo está determinado a la finalización de unas obras que se están llevando a cabo en las instalaciones sobre cuyo plazo no existe una garantía en firme”, explica Andrés Góngora, desde la organización agraria.
Soluciones para el Poniente
También se han abordado otras situaciones relacionadas con la Comarca del Poniente almeriense, especialmente para los municipios de Adra y El Ejido. Todo indica que para garantizar el regadío en estas zonas hay que recurrir a aguas no convencionales, y más en concreto al abastecimiento proporcionado por las EDAR de Roquetas y de El Ejido, “ambas plantas se encuentran ya en funcionamiento. Pero, en este sentido, desde COAG exigimos, de forma clara y firme, que ese aprovechamiento no suponga un encarecimiento del agua para los agricultores. No puede ser que estemos proporcionando una doble vida a un recurso que, en caso contrario tendría que ser vertido al mar, y, sin embargo, se nos penalice con un sobrecoste de producción”.
Regular el agua es prioritario
En este sentido, COAG Almería ha trasladado a los responsables de Agricultura en Almería la necesidad de poner en marcha acciones en otros ámbitos, además de los mencionados que serían medidas de urgencia o de emergencia. Así, y a medio plazo, es prioritario aumentar la capacidad de guardar agua, para lo que se necesita activar una serie de obras de regulación, como embalses y otras infraestructuras hidrológicas. En este sentido, el delegado de Agricultura ha informado, durante el encuentro, de la activación del plan PARRA, a través del cual está previsto subvencionar hasta el 100% de los proyectos de canalización y embalses necesarios para implementar este tipo de medidas. “Desde COAG insistimos en la necesidad de que las Comunidades de Regantes y las Juntas Centrales de Usuarios aprovechen estos recursos financieros, públicos, para invertir en obras de mejora del regadío, sobre todo, en aquellas destinadas a su almacenamiento. Desde COAG vamos a estar muy vigilantes este verano y pedimos a los agricultores y agricultoras que nos trasladen los problemas que se encuentren en materia de agua pues es un tema que nos preocupa y nos ocupa mucho en la organización agraria COAG”, ha concluido Andrés Góngora.