Sustracción de motores y cables de cobre
- Las áreas de San Isidro, El Viso, el 21, El Nazareno y La Cañada son las principales afectadas de esta nueva oleada de robos, aunque también se están produciendo incursiones en el Poniente, especialmente en Adra y La Mojonera.
- La vulnerabilidad de las explotaciones agrarias, al encontrarse sin vigilancia ni ser viables los sistemas de protección a distancia, anima a los grupos de ladrones, siendo ahora los motores de mecanización de las ventanas y los cables de cobre, los principales objetos sustraídos.
Almería, 21 de marzo de 2024.- La Coordinadora de Organizaciones Agrarias y Ganaderas, COAG, de Almería, alerta sobre el incremento de robos que se está produciendo en zonas agrarias de la comarca de Níjar, especialmente, en San Isidro, El Viso, el 21, El Nazareno y La Cañada. También en el Poniente se están dando meses de mayor conflictividad en áreas de Adra y La Mojonera.
Los agricultores de la zona más afectada en este momento (Níjar y La Cañada), se están viendo acosados por el aumento de robos en estas últimas semanas. Los ladrones se están sobre todo enfocando en la sustracción de motores de mecanización de ventanas y los cables de cobre. Por parte de los agricultores ya se han realizado numerosas reuniones y comunicaciones ante las autoridades para alertar sobre el problema sin conseguir medidas eficaces al respecto.
En este sentido, desde la organización agraria se demanda una respuesta rápida por parte de las autoridades, aumentando el número de efectivos destinados a las zonas de campo durante las próximas semanas debido a la dificultad para conseguir proteger las explotaciones, tanto de forma externa (efectivos policiales o vigilancia) como interna (sistemas de alarmas).
“De la misma forma nos parece importante aumentar la vigilancia en los mercados de compra – venta de productos de segunda mano pues, aunque desde el sector estemos prevenidos y se denuncien los hechos sospechosos, el aumento del control es lo realmente efectivo en estos casos”, indica Andrés Góngora, secretario Provincial de COAG Almería.
Así se invita al propio sector agrario a extremar las precauciones en la adquisición de productos de segunda mano asegurando su procedencia adecuadamente y dando la voz de alarma ante cualquier sospecha de que pudiera tratarse de material robado.
La dificultad para abarcar todas las zonas afectadas y la facilidad con la que los grupos de ladrones se mueven y manejan por el área, permitiendo suponer que se trata de personas con un conocimiento del lugar muy exacto, complican las labores de vigilancia por parte de los vecinos del lugar y de los agricultores quienes se han visto obligados a recurrir a medidas extremas como “el soldado de los motores o la instalación de aparatos GPS dentro de los enseres que sabemos que llaman la atención de los ladrones para poder hacer un seguimiento de los mismos en caso de sustracción”, informa Javier Rivas, agricultor de San Isidro y miembro de la Ejecutiva de COAG Almería.
En efecto, los medios de comunicación ya se han hecho eco de esta nueva oleada de robos a través de la historia vivida por un agricultor que puso en práctica, avivando el ingenio, el método referido de geolocalización del objeto sustraído, en este caso cable.
Aún así “es necesario reforzar la seguridad. Tienen que vigilar más y responder ante más alarmas”, concluye Andrés Góngora, secretario Provincial de COAG Almería. El refuerzo de la seguridad se hace prioritario, fundamentalmente en las zonas agrarias y durante franjas horarias críticas en las que el agricultor/a no se encuentra en el invernadero, como durante el mediodía o la noche, momentos en los que el entorno está más expuesto al no haber afluencia de personas en las inmediaciones o en las explotaciones.